La industria, los modelos de fabricación, la tecnología y el conocimiento han evolucionado a una velocidad extraordinaria. El mundo cambia y las necesidades de la industria también. La demanda de talento altamente cualificado y preparado para puestos de trabajo en empresas industriales convive con la desorientación y frustración de muchos jóvenes que no terminan de ver con claridad las posibilidades de su futuro profesional.
IMH es el claro ejemplo de la importancia de cuidar ese eslabón clave en la construcción de un futuro económico y social próspero. La formación de las personas. El campus de IMH en pleno corazón industrial de Gipuzkoa, a la vanguardia en todo lo referente a la fabricación avanzada y digital, pioneros en el modelo Dual y con unas tasas de empleabilidad altísimas, quiere seguir manteniendo su competitividad y reconectar con su principal audiencia, los jóvenes.
Reto:
Reposicionar estratégicamente IMH y construir una identidad para hacerlo más atractivo para las nuevas generaciones. Tras 30 años de crecimiento y cambios, nos encontramos con un centro complejo en su estructura pero con una oferta reducida respecto a sus competidores. Un crecimiento en el que las denominativas internas como submarcas habían aflorado para desdibujar el conjunto de la marca IMH y hacer poco entendible su propuesta de valor.
Era necesario una revisión de su arquitectura de marcas para mejorar esto y para equilibrar un posicionamiento muy anclado en la formación profesional, que no ayudaba a elevar el prestigio de la universidad.
Por otra parte se trataba de construir una conexión emocional con las generaciones que quieren atraer, jóvenes inmersos en la tecnología y con unas ambiciones diferentes. Una marca que conecte las inquietudes de los estudiantes con el talento que la industria está demandando.
Solución:
Tras un profundo análisis del centro, y tomar el pulso de las diferentes audiencias del mismo, en TACTICCO vimos clara la necesidad de afianzar y mostrar con orgullo la denominativa que amparase a todas las líneas de actuación IMH, dejando de lado las submarcas demasiado complejas para quedarnos con Campus como tagline. El Campus de la fabricación avanzada y digital. La formación más completa y práctica para la inmersión en el mundo de la empresa industrial. Y bajo este campus construimos una arquitectura más sencilla, que aúna de forma equilibrada la Universidad, la FP y la formación a trabajadores. Una marca conectada con la industria desde sus inicios.
Definimos una personalidad de marca inspiradora y más cercana a las inquietudes de los habitantes y futuros estudiantes del Campus, con la tecnología, la emoción, la valentía y el espíritu de colaboración como ingredientes principales. Para defender con orgullo un centro singular, construyendo una identidad marcadamente diferente para proyectar un centro transformador como es el IMH.
Identidad:
Una marca que representa mucho más que un centro de enseñanza. Representa todo un campus en el que sus miembros son parte de un colectivo unidos por la pasión de crear. Una marca dinámica, que evoluciona constantemente, al día en todo lo que a tecnología se refiere. Una forma que es la abstracción de ese campus y una ventana abierta al mundo y a las necesidades de la industria del futuro. Formas que se adaptan a cada marca de su arquitectura igual que en MH se adaptan a cada alumno y a cada proyecto. Una gama de color infinita y vibrante. Llena de actividad, inspiradora y tecnológicamente emocionante. Acompañado por una tipográfia con un marcado carácter digital.
Un claim que se dirige a los estudiantes y los alienta a dar forma a su talento y a su futuro. Directamente relacionado con las formas de la marca y con la propia materia impartida.
Un sistema visual coherente a la vez que dinámico y adaptable, fácil de llevar a las diferentes necesidades comunicativas de IMH en el que una premisa estaba clara: La empresa real, la industria vasca, allí donde realmente se forman los alumnos y en la que IMH realiza proyectos de innovación debía estar mucho más presente. Por eso tanto sus fotografías como vídeos, marcas y referencias a ellas son ahora parte de la estrategia de comunicación.