Contemplar las esculturas de Oteiza y Chillida, comer en restaurantes de primer nivel, escalar montes con buenas vistas o caminar por lugares icónicos como San Juan de Gaztelugatxe… Euskal Herria propone experiencias exquisitas.
El arte, la piedra y la gastronomía son tres insignias de nuestro territorio. Joseba Lekuona trabaja con estos tres componentes ofreciendo como resultado obras de arte que invitan a vivir una experiencia gastronómica singular.
Reto:
Desarrollar una marca que ponga en valor al artista y a su obra sin dejar de lado la experiencia gastronómica que habilitan las piezas. Encontrar el equilibrio entre la austeridad y lo suntuoso, entre lo rústico y la sofisticación, construir la experiencia gastronómica de lujo desde una categoría artística. Una marca con características muy locales, pero que le habla a un público que es de todo el mundo.
Solución:
A la propuesta de valor la encontramos en el núcleo de la marca, sintetiza los elementos más esenciales de Hartea: Piedra. Arte. Gastronomía. Las propias obras son el gran diferencial y ubicarnos en ese mundo nos permite hablar desde la autenticidad y la coherencia. Nuestra propuesta de valor representa el aspecto más robusto, más contundente de la marca. La característica más natural de la piedra. Como contracara, definimos el territorio de marca recogiendo los atributos más elevados: Distinción Natural. Porque entrar en contacto con la obra de Joseba es una experiencia exclusiva y un volver a lo esencial.
El contacto con la obra despierta los sentidos, comer, contemplar, tocar una superficie áspera o lisa, sentir el contraste del peso de la piedra en las manos y la liviandad de la comida. Es una marca sensorial y buscamos poner al desnudo la piedra. Expuesta como obra de arte o invitando a vivir una experiencia gastronómica, buscamos conseguir que la piedra sea la gran protagonista, en clave de lujo austero.
Acompañamos la marca con un tono de voz poético, que refleja la visión de Joseba. Para la identidad visual definimos juegos tipográficos, buscamos en ellos singularidad y buen gusto, seleccionamos la paleta más armónica posible fiel a la piedra, buscamos las formas, las ondas que llevan a Joseba en su viaje hacia la autenticidad de las piezas, también en las fotografías.
Forma: La ergonomía, el contacto físico, la experiencia gastronómica y la forma de los dedos, la palma de la mano y sus movimientos naturales se ven representadas en cada pieza, en cada honda y en cada movimiento. Es por esto que la forma tiene un gran peso sobre la identidad visual de Hartea.
Color: Para la elección de los colores secundarios nos basamos en el color natural de cada piedra, representando su procedencia y la nobleza del material que la compone.
Textura: El contacto con la piedra hace del producto una experiencia única: la forma de la mano, la rugosidad de una cara y la sutileza de la otra, el tacto de los dedos, su ergonomía… Trasladamos estas particularidades a los diferentes soportes de comunicación, desde el fondo mármol de la web, hasta la textura del papel que escogimos, porque todo construye la marca.
Ondas: Representamos las líneas, las ondas y la elasticidad que alcanza la piedra en el estilo fotográfico, en el logo y en las piezas clave de promoción de la marca.
Hartea es una marca que invita a vivir una experiencia gastronómica distinguida a través de una obra de arte.